Un retrato fotográfico es una foto de alguien que sabe que está siendo fotografiado, y lo que hace con este conocimiento forma parte de la foto tanto como lo que lleva puesto o la manera en que se ve. Está involucrado en lo que está pasando, y tiene un cierto poder real sobre el resultado.
Lisette Model me dijo que sentía que estas fotografías de mi padre eran “actuaciones», y yo pienso lo mismo. Todos actuamos. Es lo que hacemos continuamente, de una manera no intencional ni deliberada. Es una forma de hablar de nosotros mismos con la esperanza de ser reconocidos como lo que querríamos ser. Confío en las actuaciones. Desecharlas no te acerca necesariamente a nada. La manera en que alguien que está siendo fotografiado se presenta ante la cámara y el efecto de la respuesta del fotógrafo en relación a esa presencia es de lo que se trata al hacer un retrato. tweet
En esta situación, el hecho era complicado y se vio enriquecido porque yo estaba usando con mi propio padre todo lo que había aprendido fotografiando a desconocidos. Él era leal a la forma en que quería ser visto; yo a la forma en que lo veía, lo que estaba relacionado no sólo con mis sentimientos hacia mi padre, sino con mis sentimientos sobre lo que es ser cualquiera. Al principio, él accedió simplemente a que yo lo fotografiara, pero pienso que después de un tiempo comenzó a querer que lo hiciera. Comenzó a confiar en eso, y yo también, porque era la forma que los dos teníamos de forzarnos mutuamente reconocer lo que éramos. Durante los últimos años de su vida lo fotografié muchas veces, pero no miré realmente las fotografías sino hasta después de su muerte. Ellas me parecen ahora, fuera del contexto de aquella época, completamente independientes de la experiencia de tomarlas. Existen por sí mismas. Lo que sea que haya pasado entre nosotros fue importante para nosotros, pero no lo es para las fotografías. Lo que está allí es autónomo y, de alguna extraña manera, está libre de nosotros dos. tweet
Nueva York, 14 de junio de 1974.